Marzo 29, 2024
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Tengamos Confianza En El Señor

 
 

Esaú Crespo

Introducción:

Los Evangelios nos enseñan que los discípulos fueron entrenados por el Señor por un espacio de más de tres años. El Señor Jesús no tuvo un aula para enseñar los fundamentos teóricos de su doctrina. En aquellos tiempos eran famosos los liceos o las academias privadas donde un puñado de estudiantes se reunía a los pies del maestro para recibir la teoría sobre cualquier área del saber. El Señor Jesucristo enseñó a sus discípulos a través de la experiencia en el ministerio que ejecutaron día a día. La confianza es el resultado de andar con el Señor experimentando su poder u su amor hacia su pueblo. Consideremos las siguientes enseñanzas:

I. La Escuela del Señor (vs. 22-25)

  • El Señor enseñó a sus discípulos en base a un plan. El Señor no conoce las sorpresas. La experiencia que tuvieron los apóstoles obedecía a un plan del Señor para darles la enseñanza que con Cristo a nuestro lado la vida está llena de victorias.
  • La escuela del Señor es en base a un ministerio de intercesión. Ver Hebreos 7:25. "Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por el se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos".
  • El Señor tuvo un ministerio fuerte de oración intercesora a favor de sus discípulos.
  • El momento de la prueba.
    • "Azotada por las olas"
      Lit. "bautizada por las olas"
    • "El viento era contrario"
    • "La cuarta vigilia de la noche"
    • "Un fantasma"
    • ¿Necesita Dios probarnos para saber lo que hay en nuestros corazones? Mil veces no!!!
      Lo hace para que nosotros nos conozcamos

II. La Presencia del Señor (v. 26).

  • La presencia del Señor no es percibida cuando hay ofuscación. Los apóstoles no se dieron cuenta que estaba con ellos la presencia del Señor porque la aflicción producida por la tormenta no les permitía contemplar la presencia de su Maestro y Salvador.
  • La presencia del Señor no es percibida cuando no hay percepción espiritual.
  • La presencia del Señor no es percibida cuando hay ignorancia de la Palabra. La Biblia dice claramente que Dios nos está lejos de ninguno de nosotros. En Jeremías 33:3 el Señor dice que le clamemos y que El está dispuesto a escucharnos y a darnos lecciones de cosas que no podemos entender sin su ayuda.
  • Cuando creemos que estamos más solos, entonces tenemos la presencia del Señor más palpable.

III. El Auxilio del Señor (vs. 27-30)

  • Les habló: "Tened animo"
  • "No tengáis temor porque yo soy"
    • "Yo Soy" fue el nombre que Dios usó para revelarse a Moisés en contexto de esclavitud. El Señor Jesucristo en el Evangelio de Juan usa constantemente la frase y teología del "Yo Soy"
    • "Yo soy el buen Pastor"
    • "Yo soy la luz del mundo". El concepto "luz" en el Evangelio de Juan denota:
      • vida.
      • Orientación.
      • Sabiduría.
    • "Yo soy el pan de vida"
    • "Yo soy tu salvador"

IV. La Exhortación del Señor. (V.31)

"¿Hombre de poca fe porque dudaste?"

  • Debemos confiar en el poder del Señor sobre los elementos naturales.
  • Debemos confiar en el poder del Señor sobre los hombres.
  • Debemos confiar en el poder del Señor sobre el infierno.
  • "Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que esta en vosotros, que el que esta en el mundo". (I Juan 4:4)
  • Debemos confiar en el poder del Señor sobre el pecado y la muerte. Romanos 6:23.

V. La Adoracion al Señor (vs. 32,33)

  • Lo adoraron.
  • Lo confesaron.

Conclusión:

La experiencia dolorosa de los discípulos estaba anticipada en el plan didáctico del Señor para que ellos aprendieran la lección de que su Maestro nunca abandona a su pueblo y que aún cuando las circunstancias sean adversas en la vida, el Señor nunca nos dejará ni nos desamparará.

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Pasaje

Mateo 14:22-33

22 En seguida Jesús hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a la otra ribera, entre tanto que él despedía a la multitud.

23 Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo.

24 Y ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas; porque el viento era contrario.

25 Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar.

26 Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo.

27 Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!

28 Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas.

29 Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús.

30 Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame!

31 Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?

32 Y cuando ellos subieron en la barca, se calmó el viento.

33 Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres Hijo de Dios.

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